Escrito por: David Camero López
Matilda, es una obra que muchas personas han leído durante su infancia, y que recuerdan con cariño. Es uno de aquellos libros que nunca quieres que llegue su final y que cuando lo hace, deseas saber que sucede después. Es por estos motivos por los que hemos decidido hablar de esta famosa obra escrita por Roald Dahl e ilustrada por Quentin Blake .
En esta ocasión, voy a explicar las sensaciones personales que surgieron en mi tras una primera lectura.
No recuerdo exactamente con qué edad llegué a leer Matilda, tan solo recuerdo que era uno de los libros obligatorios que debíamos leer por entonces.
Lo que más me llamó la atención, es como los padres trataban a su hija, llegué a ponerme en la situación de Matilda y pensaba; que si mis padres, fuesen como los de Matilda, dejaría de estudiar y no hacer las actividades que me mandaban por las tardes, algo que me gustaba; pero este hecho demostraría mis padres pasaban de mi. Es por ello, por lo que empecé a valorar a mis padres y a entender porque insistían y me regañaban cuando no hacía mis actividades extraescolares.
He de destacar, las risas que produjeron en mi las travesuras de Matilda y las acciones de la directora Trunchbull, sobre todo cuando Matilda echa tinte, color rubio plateado, de su madre, dentro del bote de loción de aceite de violetas de su padre. No podía parar de reír, al imaginarme aquel padre con el pelo tintado de rubio plateado.
Las ilustraciones de Quentin Blake, son un aliciente más de Matilda. Estas imágenes cuyas líneas están hechas con un pulso tímido y dubitativo complementan en medida al texto, sobre todo para el público más joven, puesto que complementan a las descripciones. Son ilustraciones hechas a acuarela, en tonos grises, y reflejan muy bien el estilo de Q.Blake, mostrando una línea insegura y exagerando su pulso para parecerse al dibujo de un niño. Cualquier persona podría pensar que son fáciles de elaborar, pero su línea es inimitable y más cuando se trata de desarrollar un dibujo propio dando ese toque personal que Blake logra.
Para finalizar os dejamos el trailer de la adaptación cinematográfica de Matilda, película que la recomendamos.
Matilda, es una obra que muchas personas han leído durante su infancia, y que recuerdan con cariño. Es uno de aquellos libros que nunca quieres que llegue su final y que cuando lo hace, deseas saber que sucede después. Es por estos motivos por los que hemos decidido hablar de esta famosa obra escrita por Roald Dahl e ilustrada por Quentin Blake .
En esta ocasión, voy a explicar las sensaciones personales que surgieron en mi tras una primera lectura.
No recuerdo exactamente con qué edad llegué a leer Matilda, tan solo recuerdo que era uno de los libros obligatorios que debíamos leer por entonces.
Lo que más me llamó la atención, es como los padres trataban a su hija, llegué a ponerme en la situación de Matilda y pensaba; que si mis padres, fuesen como los de Matilda, dejaría de estudiar y no hacer las actividades que me mandaban por las tardes, algo que me gustaba; pero este hecho demostraría mis padres pasaban de mi. Es por ello, por lo que empecé a valorar a mis padres y a entender porque insistían y me regañaban cuando no hacía mis actividades extraescolares.
He de destacar, las risas que produjeron en mi las travesuras de Matilda y las acciones de la directora Trunchbull, sobre todo cuando Matilda echa tinte, color rubio plateado, de su madre, dentro del bote de loción de aceite de violetas de su padre. No podía parar de reír, al imaginarme aquel padre con el pelo tintado de rubio plateado.
Las ilustraciones de Quentin Blake, son un aliciente más de Matilda. Estas imágenes cuyas líneas están hechas con un pulso tímido y dubitativo complementan en medida al texto, sobre todo para el público más joven, puesto que complementan a las descripciones. Son ilustraciones hechas a acuarela, en tonos grises, y reflejan muy bien el estilo de Q.Blake, mostrando una línea insegura y exagerando su pulso para parecerse al dibujo de un niño. Cualquier persona podría pensar que son fáciles de elaborar, pero su línea es inimitable y más cuando se trata de desarrollar un dibujo propio dando ese toque personal que Blake logra.
Para finalizar os dejamos el trailer de la adaptación cinematográfica de Matilda, película que la recomendamos.